Terapia EMDR

Desensibilización y reprocesamiento a través del movimiento ocular de los ojos.

Terapia EMDR

Desensibilización y reprocesamiento a través del movimiento ocular de los ojos.

Es una psicoterapia basada en la evidencia, dirigida por terapeutas, para el trastorno de estrés postraumático (TEPT). Además, los resultados exitosos están bien documentados en la literatura para el tratamiento EMDR de otros trastornos psiquiátricos, problemas de salud mental y síntomas somáticos. El modelo en el que se basa EMDR, Procesamiento Adaptativo de Información (PAI), postula que gran parte de la psicopatología se debe a la codificación desadaptativa y / o al procesamiento incompleto de experiencias de vida adversas traumáticas o perturbadoras. Esto perjudica la capacidad del paciente para integrar estas experiencias de una manera adaptativa. El proceso de ocho fases y tres vertientes de EMDR facilita la reanudación del procesamiento normal de la información y la integración. Este enfoque de tratamiento, que se dirige a la experiencia pasada, los desencadenantes actuales y los desafíos
potenciales futuros, da como resultado el alivio de los síntomas presentados, una disminución o eliminación de la angustia de la memoria perturbadora, una mejor visión del yo, alivio de la perturbación corporal y resolución de los desencadenantes anticipados presentes y futuros.
En el sentido más amplio, EMDR es un enfoque de psicoterapia integradora destinado a tratar trastornos psicológicos, aliviar el sufrimiento humano y ayudar a las personas a desarrollar su potencial de desarrollo, minimizando al mismo tiempo los riesgos de daño en su aplicación. Para el paciente, el tratamiento EMDR tiene como objetivo lograr un tratamiento integral de manera segura, efectiva y eficiente, manteniendo la estabilidad del paciente.
Los procedimientos EMDR facilitan el reprocesamiento efectivo de eventos traumáticos o experiencias de vida adversas y creencias asociadas, a una resolución adaptativa. Se utilizan pasos de procedimiento específicos para acceder y reprocesar información que incorpora estimulación visual bilateral, auditiva o táctil alterna. Estos procedimientos y protocolos de tratamiento bien definidos facilitan el reprocesamiento de la información. EMDR utiliza un enfoque de tratamiento de 8 fases y 3 vertientes que optimiza la estabilización suficiente del paciente antes, durante y después del reprocesamiento de recuerdos angustiantes, traumáticos y estímulos asociados. La intención del enfoque EMDR para la psicoterapia es facilitar la capacidad innata del paciente para sanar. Por lo tanto, durante el reprocesamiento de la memoria, la intervención del terapeuta se mantiene al mínimo necesario para la continuidad del reprocesamiento de la información.
Para lograr efectos integrales del tratamiento, generalmente se utiliza un protocolo de tratamiento básico de tres vertientes para que los eventos pasados se reprocesen, los desencadenantes presentes se desensibilizen y se exploren los resultados adaptativos futuros para los desafíos relacionados. El momento de abordar los tres vertientes está determinado por la estabilidad, la preparación y la situación del paciente. Puede haber situaciones en las que se altere el orden o se omitan las tres vertientes, según el cuadro clínico y el juicio clínico.
Como psicoterapia, EMDR se desarrolla de acuerdo con las necesidades, los recursos, el diagnóstico y el desarrollo del paciente individual en el contexto de la relación terapéutica. Por lo tanto, el terapeuta, utilizando el juicio clínico, enfatiza los elementos de manera diferente dependiendo de las necesidades únicas del paciente en particular o de la población especial. El tratamiento EMDR no se completa en un número particular de sesiones. Es fundamental para EMDR que los resultados positivos de su aplicación se deriven de la interacción entre el terapeuta, el enfoque terapéutico y el paciente.